El Soliss FS Talavera cosecha en Ferrol su primera derrota del curso

Encajó el Soliss Fútbol Sala Talavera su primera derrota de la temporada y lo hizo en el Pabellón ‘A Malata’ y ante uno de los conjuntos llamados a pelear por el ascenso de categoría, un O Parrulo Ferrol que recuperaba a Adri, su jugador franquicia, y este hecho resultó ser el factor diferencial para que los puntos se quedaran en tierras gallegas merced a la victoria local por un marcador de 2-1.

Resultado ajustado, sí, pero esto no quiere decir que ambos equipos lo confiaran todo a sus defensa olvidándose de los ataques. Cierto es que a los de Juanma Marrube les tocó dejar la iniciativa a su oponente, pero más cierto es que durante los primeros compases cerca estuvieron de tomar la delantera con dos acciones consecutivas protagonizadas por Juli Caamaño y por Anass que por poco no se tradujeron el gol.

Óscar Vigo daba entrada a Adri tras su vuelta de Lituania y prácticamente nada más salir pondría en aprietos a un Álex Pérez que se estrenaba en la portería del conjunto cerámico en partido oficial. Buen partido del meta madrileño y buen partido también de su homólogo en la portería contraria, un Roberto Gozi que le blocaba a Buitre su remate en la frontal del área.

El meta brasileño no sólo comenzó a crear problemas con sus intervenciones, convirtiéndose en un muro infranqueable, sino que además, merced a su buen juego de pies, se incorporaba como quinto hombre en acciones ofensivas de los ferrolanos generando dudas en la defensa visitante en inferioridad (5x4).

Así iba transcurriendo el encuentro hasta que pasado el ecuador llegaba una de las acciones a la postre decisivas. En un lance de juego Adri y Anass, los capitanes de ambos equipos, tenían un rifi – rafe y los árbitros lo solucioban con amarillas para los dos. Dado que el de La Puebla de Montalbán ya tenía una, ésta segunda suponía su expulsión y dejar a su equipo en inferioridad.

Lo pagaron caro los rosados, que vieron como con un minuto jugado en superioridad y tras una buena acción de equipo Kevin Chis encontraba el espacio para batir a Álex Pérez y poner el 1-0 en el marcador. El tanto dejó un poco nublado a los visitantes, que casi vuelven a encajar, y Juanma Marrube lo paró con tiempo muerto.

Tras la parada técnica el partido se niveló, si bien es cierto que eran los blancos los que llevaban el peso, pero los visitantes percutían a la contra. La tuvo de esta manera Buitre hasta por dos veces, de la misma manera que Álex Pérez nubló las intenciones de Miguel Caeiro y de Adri con dos soberbias intervenciones. No daba tiempo para más y con el 1-0 nos íbamos a vestuarios.

En la reanudación poco cambió el panorama con respecto a los últimos minutos del primer acto. Hubo intercambio de golpes con Adri y Buitre y, a partir de ahí, O Parrulo le intentó meter algo de agresividad al encuentro pagándolo con varias faltas que le hicieron quedarse cerca del bonus con mucho tiempo por delante.

Juanma Marrube, viendo que la situación no era la propicia y que ese tanto del empate no llegaba, decidió darle una vuelta de tuerca y con diez minutos para el final optar por el juego de cinco con Dani Montes en ese rol. Casi tuvieron los cerámicos su recompensa con una doble ocasión, pero también casi les cuesta un susto al hacerse con la bola Roberto Gozi y casi anotar desde su área.

El tiempo trascurría y los de Óscar Vigo se metían ya con las cinco faltas. Insistía Talavera con el portero – jugador, pero éste no daba los frutos esperados. El crono iba devorando los segundos a una velocidad pasmosa, siempre parece que es así para los equipos que van por debajo, y los riesgos cada vez debían de ser mayores.

Por desgracia en una de esas acciones llegaba la intercepción de Adri, quien con maestría la ponía en el fondo de las mallas con menos de dos minutos por jugar y de esta manera el 2-0 subía la marcador de A Malata. El capitán ferrolano incluso la volvería a tener poco después, pero esta vez salvaba el poste para los de Talavera de la Reina.

Moría el partido e insistía un Soliss Fútbol Sala Talavera que iba a tener recompensa a su insistencia, a ese no desfallecer pese a ir abajo y que lograría el tanto del honor y el maquillaje por obra de un Andrés que aparecía al segundo palo para hacer el 2-1. Lástima que ese tanto llegara apenas cuando restaban cuatro segundos para el final. Ya no se jugaría más y de esta manera los tres puntos se quedaban en tierras gallegas.